Claro está que ésta es la estación de las fresas y fresones. Son frutas que necesitan crecer en un clima templado. Son alimentos muy típicos desde febrero hasta mayo, pero en abril y mayo son más dulces y sabrosas.
Limones, kiwis, naranjas, aguacates, manzanas, piñas y otras muchas frutas se consideran productos de temporada, pero también se consumen en el resto de estaciones. La subida de temperaturas se da paso a una estación más cálida y con ella sus productos de temporada. Las verduras, el pescado y los mariscos son los alimentos más comunes en primavera. Además, se consideran muy sabrosos y valorados en el mercado.
Un claro ejemplo son las cigalas, un crustáceo muy valorado en la gastronomía. Viven en aguas frías durante el verano y en invierno siempre buscan zonas más cálidas, en aguas menos profundas. Se considera un marisco con poca grasa y no aporta demasiadas calorías, rica en vitamina B5 y B3, además de contener proteínas, hierro y potasio.
El gallo, en pescados
El lenguado es un
pescado rico en yodo
y con poca grasa
El gallo también pertenece a un producto destacado de este mes. Es un alimento muy nutritivo, ya que contiene niveles bajos de grasa y se trata de un pescado blanco que contiene vitaminas B6, B3 y B9, y hierro y fósforo que fortalece los huesos y mejora el sistema nervioso. Esta muy valorado, ya que tiene muchos minerales y es muy completo.
Otro de los productos estrella del mes es el lenguado, un pescado rico en yodo y también tiene poca grasa. Es importante decir que este alimento ayuda a regular problemas de tiroides y es bueno para las embarazadas; es un pescado blanco que aporta vitaminas B3 y B9, potasio, fósforo y magnesio.
En general, la temporada se caracteriza por los pescados blancos y saludables. Además, se pueden preparar cantidad de recetas con esta variedad de pescados, mariscos y verduras.